Taller de Escucha Activa

Os dejo con una imagen del taller que impartimos ayer junto con Inés Caralt. 5 horas de reflexión y aprendizaje sobre qué impedimentos nos encontramos a la hora de escuchar plenamente al otr@, qué herramientas podemos utilizar para mejorar nuestra escucha y practicamos el arte del silencio, como espacio para conectar con un@ mism@ y…

APUESTO POR MÍ

despertar1

“El silencio es el espacio donde uno se despierta,

y la mente ruidosa es el espacio donde uno se mantiene dormido.” Osho

DORMIR SIN SOÑAR

Vivimos tremendamente dormidos y sí, se está muy bien en la cama pero a veces uno coge el hábito de ir posponiendo la alarma sin saber para qué exactamente; “costumbre”, “es que estoy tan agusto”… Ya, en el confort se está muy bien pero… estamos vivos, verdad? Es hora de espabilar y despertar, que aquí estamos de pasada.

El hecho de no ser conscientes del propio sentido nos hace mover y actuar por inercia debido a los hábitos arraigados que vamos perpetuando. En ellos es muy difícil advertir la realidad de nuestra vida, como si un velo nos tapara los ojos y nos dificultara ver quienes somos realmente. Cuando el velo se cae, al menos por un instante, resulta doloroso asumir nuestra realidad hecho que nos lleva en muchas ocasiones a eludir la propia responsabilidad de lo que somos, pensamos, sentimos y hacemos, y preferimos pensar que no estamos eligiendo nada de nuestra vida, quedando determinados por las circunstancias y alimentando la imagen de «pobrecit@ de mí». Mientras la realidad es que, a pesar de no ser conscientes, elegimos constantemente, incluso pensando que no elegimos estamos eligiendo.

 

Para un momento. Para dentro del caos en el que estás absorto. Si sigues en movimiento quizás pienses que avanzas pero puedes estar desperdiciando mucho de tu talento. Lo de afuera va a seguir allí con el mismo dinamismo; ahora no te preocupes en “ya pero si no hago lo perderé todo”, “si no hago… qué pasará?” “tengo muchas obligaciones”…

 

¿Y tú? ¿Qué papel tienes dentro de tu vida? ¿Vives siendo el protagonista de tu vida o te colocas en un rol más bien secundario?

Afrontar la incertidumbre para vivir el presente

AFRONTAR LA INCERTIDUMBRE PARA VIVIR EL PRESENTE

incertidumbre

Vivir en el futuro y a la vez tener miedo a la incertidumbre es una paradoja. Sin embargo, hoy en día es común preguntarse “¿qué será de mí mañana?”, ¿cómo lograré sustentar económicamente a mi familia tal y como quiero y percibo la vida?, ¿qué es lo que no quiero que pase para mantener mi negocio a flote? ¿de qué manera me puedo asegurar disfrutar la jubilación?… y un sin fin de pensamientos que nos alejan del aquí y ahora y nos hacen vivir vinculados al futuro incierto manteniéndonos en la obligación y la exigencia constante mientras perpetuamos el ritmo frenético que parece ser incansable y nunca suficiente para lograr nuestros objetivos y para sentirnos en paz disfrutando el proceso que va marcando la vida.

¿Cómo parar el pensamiento? ¿Cómo disfrutar del presente? Parece ser que buscamos desconectar de múltiples formas para silenciar nuestro ruido mental y emocional cuando la alternativa eficaz reside en parar y escuchar nuestro interior para conectar más con un@ mismo y así tomar decisiones alineadas con quienes somos.

Un primer paso a realizar es tomar consciencia de qué momentos te haces protagonista a ti mism@ durante el día y qué recursos y hábitos tienes para sentirte bien.

Si quieres, regálate unos minutos para reflexionar. Toma un papel y boli y asegúrate que estás en un entorno relajado para que puedas centrarte exclusivamente en ti.

Sobre el artículo ¿Cómo evitar la masturbación?

SOBRE EL ARTÍCULO ¿CÓMO EVITAR LA MASTURBACIÓN?

Comparto con vosotros un escrito que publiqué hace ya 2 años como estudiante de prácticas del Institut Gomà.

Hace un par de semanas se empezó a difundir por las redes sociales un artículo publicado en el ABC sobre cómo evitar la masturbación. De entrada, el título me extrañó: ¿Evitar? “¿Para qué tendría que evitarse?” Aunque me llamó la atención no me creé ninguna expectativa; abrí el enlace con la intención de descubrir qué podía estar escrito detrás de un título tan polémico.

El artículo dice que hay ciertas situaciones que inducen a la masturbación como el aburrimiento, la soledad, el miedo, el estrés y el cansancio y que, para no caer en el “círculo vicioso” se plantean una serie de pautas y consejos para seguir evitándola.

La publicación defiende que la masturbación no es buena ni necesaria para la salud, que hace falta protegernos de la erotización del entorno y que, con una muestra de madurez y valentía -y no de debilidad-, forma parte de la decisión libre de la persona decir NO a la masturbación, ya que negarse no es “anormal”, al contrario: es prepararse para el amor sólido entendiendo esta preparación en términos de ganar calidad en la capacidad de amar.

Para llevarlo a cabo el artículo propone una serie de consejos para salir del círculo vicioso: Protegerse de la agresión comercial del erotismo ambiental con filtros en el ordenador o bien hacer uso de éste en un espacio compartido de la casa. También defiende que hay que llevar un estilo de vida saludable, cuidando la dieta, haciendo deporte y evitando los tóxicos ya que se permitirá tener una mayor salud psicológica al canalizar la energía sexual y la agresividad propia de la adolescencia. Para llegar a todo esto se necesita fuerza de voluntad, afán de superación y espíritu de sacrificio. Por otro lado, hace falta utilizar el tiempo libre de modo constructivo y no pasar la tarde en centros comerciales; esto podría hacer surgir “rollos de una tarde” y caer en la trampa de la masturbación y no del amor sólido. Una de las soluciones propuestas para pasar el tiempo libre sería construir un grupo de amigos con los que se hablase de temas como el aborto, la eutanasia, la responsabilidad delante el hambre en el mundo, etc. Es necesario evitar los grupos de amigos que se forman para compartir frustraciones y facilitar los constructivos en los que cada uno de los miembros cuenta.

Al leer el artículo me quedé de piedra. ¿Cómo es posible que en el S.XXI en el que vivimos aún se difundan publicaciones de este calibre? Antes de entrar en debate tengo que decir que este artículo deja mucho que desear. El texto no tiene estructuración aparente, no está basado en ninguna evidencia empírica que pueda corroborar la realidad que defienden y, además, está escrito por un periodista que no tiene formación en el ámbito de la sexualidad. La sensación que me llega es que se intenta difundir una opinión que no tiene ninguna validez ni es representativa para la población y que, además, no guarda respeto en las formas. Me explico: