REFLEXIÓN PERSONAL: EL DISFRUTAR COMO ESTRATEGIA PARA AFRONTAR EL MIEDO A LA PÉRDIDA

«Somos potencialmente capaces de disfrutar de una dicha absoluta pero no sabemos cómo hacerlo.»

(Osho)

Quien me conoce sabe que soy de llevar anillos; veces contadas habré salido de casa sin. Lo reconozco, tengo cierto apego, en especial a algunos de ellos, ya sea por quien me los ha regalado o dado, por el significado que tienen para mí, por el lugar dónde los compré…

Hace unas semanas me pasó algo con uno de los anillos más especiales que tengo y gracias a ello saqué un gran aprendizaje, que hoy quiero compartir con vosotr@s.

El anillo es una piedra luna (como la piedra de la fotografía) que compré en una de mis ciudades favoritas del norte de la Índia, ya en el Pre-Himalaya. No soy de comprar por comprar, el motivo que normalmente me impulsa para comprar es sentir un «este es para mí«. Y eso me pasó sólo ver el anillo del que os hablo. Más tarde encontré el sentido:

MIS EMOCIONES NO SON YO

«Que sientas rabia no quiere decir que seas un rabioso.

Que sientas miedo no quiere decir que seas un miedica.

Que sientas tristeza no quiere decir que seas un deprimido.

Que sientas alegría no quiere decir que seas un alegre.

Sentir no es ser. «

 

Sentir es sentir. Ser es ser. Las emociones se sienten en el cuerpo y forman parte de la biología humana, están fuera de nuestro control y aparecen cuando aparecen, sin pedirnos permiso. Lo siento, no tenemos una barita mágica para escoger cuándo sí y cuándo no, ni con quién ni cómo.